Llevamos muchísimo tiempo hablando de los diferentes usos que le damos al cristal y de lo asombroso que puede llegar a ser este material en las manos adecuadas pero a veces nos olvidamos de que también lo utilizamos junto a mil cosas más como un elemento más de fabricación en, por ejemplo, relojes o joyas, gafas y piezas ópticas, etc, e imagino que, como habréis comprobado, limpiar el cristal puede ser una ardua tarea y por eso yo recomiendo, para profesionales del sector, Tierratech, una empresa especializada en la limpieza por ultrasonidos.
Algunos de vosotros os estaréis preguntando de qué demonios estoy hablando y por eso me he tomado la molestia de buscaros la respuesta a esa pregunta en la Wikipedia que aunque no sea fiable al 100% resuelve muchísimas dudas: “Limpieza ultrasónica”. Pero de todos modos os voy a hacer un adelanto resumido para aquellos que no tengan demasiado tiempo o muy pocas ganas de leer artículos ahora mismo.
Un limpiador ultrasónico es un dispositivo de limpieza por ultrasonidos que sólo son efectivos con la solución de limpieza apropiada para cada objeto. Por ejemplo, si quisiéramos limpiar una lente la colocaríamos en una cámara del aparato que contiene un líquido conductor de ultrasonidos y entonces un generador de ultrasonidos produce unas ondas e el fluido, una especie de señal eléctrica oscilante a la frecuencia de ultrasonidos. Esto crea ondas de compresión en el líquido, y éstas una seria de burbujas a temperaturas de 10000 K y presiones de 50000 libras por pulgada que eliminan la suciedad y los contaminantes que pueda tener esa lente.
La verdad es que es mucho mejor verlo que leerlo porque por muy claro que se pretenda ser resulta realmente complicado explicar el funcionamiento de estos aparatos y encima pretender que una persona, no demasiado puesta en la química, entienda completamente de lo que estamos hablando, pero bueno, como bien dicen por ahí lo importante es la intención y yo he intentado que entendáis un poquito más de cómo funciona este recurso.
La realidad es que, además de una limpieza muchísimo más profunda que la que hacemos con otro tipo de aparatos y productos, ganamos en efectividad y tiempo, pero también en otra cosa que cuando hablamos de cristales es realmente importante: en probabilidades de rotura. Cuando manejamos demasiado una pieza de cristal corremos el riesgo de arañarla, quebrarla o romperla totalmente si se nos cae al suelo pero gracias a este método de limpieza la manipulación del objeto en sí es mínima puesto que sólo tenemos que colocarla en la cámara en al que corresponde y esperar un rato a que los ultrasonidos hagan su trabajo. Además, dependiendo del tamaño de los objetos, podemos limpiar varios a la vez y ganar así también un poco de tiempo en la producción.
La verdad es que cada día nos encontramos con nuevos inventos que nos hacen la vida un poco más fácil y cuando se habla además de la vida profesional ¿por qué no usarlos y dejar que nos ayuden un poco?